La remoción del Juez Otranto de la causa en la que se investiga la desaparición de Santiago marca el comienzo de una nueva etapa.
Hemos vivido casi dos meses con una esperanza en creciente agonía. Fuimos testigos y víctimas de una justicia lenta e ineficaz.
En el día de ayer, el nuevo Juez designado, el Dr. Lleral, se comunicó con nosotros y nos manifestó que haría todo lo posible para avanzar en la investigación. Su gesto, de profunda calidez humana, renueva nuestra fe en poder llegar a la verdad.
Una vez más, comprometemos toda la colaboración a nuestro alcance para lograr ese objetivo.
Anhelamos que se le conceda al nuevo magistrado la oportunidad de trabajar sin interferencias de ninguna clase.
Necesitamos saber dónde está Santiago, que le pasó, quienes son los responsables de tanto dolor.
Esa es nuestra causa y no vamos a bajar los brazos.